“Hacer lo que uno ama” es, cuanto menos, el sueño del pibe. Es esa actitud que se envalentona en subsistir al lado de las responsabilidades y las presiones que la misma ejercita a diario en la mayoría de los mortales. Sin embargo, cuando se abre una puerta desde la que se puede ver con claridad qué disfrutamos hacer, entonces el engranaje fluye convirtiendo la presión en entusiasmo.
No todos llevan ese entusiasmo en el semblante. Es casi una posesión envidiable de aquellos que emprendieron su propio camino, empezando con la sola visualización de una idea y convirtiéndola en un negocio con mucho esfuerzo, cooperación y buenas decisiones.
Pato Fuks, CEO de WeWork, es un fiel representante de esa fracción de la sociedad, es quien dice a viva voz “Nací emprendedor” después de preguntarle cómo se despertó ese interés en él. Claramente hizo referencia a su primer ejercicio como tal cuando me contó: “Yo fui ese chico que a los 10 años empezó un diario y vendió ejemplares a sus amigos, y desde entonces no deje de crear empresas”.
Hoy, en su posición de CEO de las oficinas de coworking habla sobre su experiencia, lo que representa su firma para él y algunas claves de emprendedor que no se dispersan en su mente aun cuando ve crecer sin frenos sus propios negocios.
HEROES: ¿Qué fue lo primero que emprendiste?
PATO: Mi primer proyecto oficial fue a los 22 años cuando abrí mi propia agencia, Achievers Publicidad. Después de conseguir a grandes clientes como un banco líder, una cadena de supermercados, el correo nacional y una de las empresas de celulares más grandes del país, Argentina cayó en una crisis profunda y tuve que cerrar la agencia. Fue un gran golpe, pero lo superé. En 2004 fundé Fën Hoteles con dos amigos y de allí logramos abrir más de 30 hoteles en América Latina y Estados Unidos, creando la cadena de administración y franquicia de hoteles con mayor crecimiento en la región. En 2016 la vendí y me uní a WeWork.
HEROES: ¿Fracasaste muchas veces?
PATO: Se puede decir que tuve los fracasos que necesitaba para poder llegar a donde estoy. Desde muy joven tuve sueños muy ambiciosos, que sabía que sólo podía lograr siendo independientes. Opté por buscar un algo en el que pocos se animaban a meter los pies: los hoteles, un negocio con altas barreras de entrada y muy competitivo. Y en lugar de partir de cero seguí el modelo de Conrad Hilton, que comenzó alquilando hoteles. Allí comienzan mis retos más grandes, que me llevan a donde estoy hoy.
HEROES: ¿El dinero es una llave importante para quien emprende o se puede comenzar de cero?
PATO: El dinero es importante, pero no es la clave; es más importante aún buscar ayuda de las personas correctas. Cuando comencé mis hoteles, me junté con dos amigos que pedimos prestados unos miles de dólares en el año 2002. Con el poco capital que conseguimos y mucha creatividad logramos sacar adelante un hotel en Buenos Aires que nos dio pié para continuar creciendo en el negocio.
HEROES: ¿Cómo ves el auge de emprendedores jóvenes?
PATO: Los argentinos hemos demostrado el potencial que tenemos como emprendedores y siento que cada vez hay más herramientas que permiten que cada día más personas se atrevan a hacerlo. Desde que estoy en WeWork he visto aún más de cerca a personas de todas las edades y a todos los niveles que tienen proyectos increíbles y que consiguen el apoyo que necesitan para sacarlos adelante. Además con las nuevas leyes pro-emprendimiento se hace más fácil obtener la estructura necesaria para comenzar.
HEROES: ¿Qué significa WeWork para vos?
PATO: Sé lo difícil que es emprender, manejar grandes empresas, o tener equipos contentos. Por eso tomé el reto de WeWork, porque estamos facilitando el camino de muchos, ofreciendo las herramientas, servicios y comunidades necesarias para que personas y empresas se puedan enfocar en lo más importante: hacer crecer sus ideas y negocios. Llegué con el compromiso de firmar siete edificios durante el primer año, y con el apoyo del gran equipo que armé, logré firmar más de 30. Hoy, ya hemos abierto más de 20 edificios en 5 países de Latinoamérica, y tenemos una comunidad de más de 20.000 miembros.
HEROES: ¿Dejarías el negocio por una idea que te parezca mejor?
PATO: Creo fielmente en el proyecto, sino no hubiese vendido mi propio negocio para enfocarme en esto. Queda claro que una empresa como esta con la valoración que tiene hoy, es un buen negocio; pero para mí los negocios se tratan de hacer lo que nos gusta, y de sentirnos llenos. Este sentimiento lo encontré en lo que hago, más allá del potencial que le veo a la propuesta y a la parte del negocio.
HEROES: ¿Qué impacto tienen tus propuestas?
PATO: Como muchas otras personas, me he propuesto hacer proyectos que han tenido un impacto real y positivo en mi vida, y espero que también en la vida de otros. Hasta ahora me ha motivado esa idea de ser un agente de cambio, y ahora creo que con la marca lo estamos logrando.
HEROES: ¿Qué considerás que dejás a la sociedad con lo que hacés?
PATO: Hoy estoy ayudando a que haya un cambio real y ojalá permanente en la manera en que nuestra sociedad piensa y se siente sobre el trabajo. Muchos pasamos más tiempo en el trabajo que en casa, y por eso es importante disfrutar el día a día y que dejemos de separar lo que es “trabajar” y “vivir”. Con WeWork estamos ayudando a que la gente haga lo que ama, y que sea feliz en el camino. Espero que a medida que sigamos abriendo ubicaciones más personas sigan empapándose de esta cultura laboral y que creemos un cambio real para las siguientes generaciones.